Diseño e impresión 3D de maquetas arquitectónicas

Aprende a convertir tus diseños de espacios en objetos reales a través de la impresión 3D

La impresión 3D, lejos de ser ya una simple curiosidad o una moda, se ha convertido en una manera realista y práctica de hacer realidad proyectos, tanto de diseño de producto como arquitectónicos. Poder dar vida a un plano arquitectónico digital te otorgará un nivel de control y atención al detalle que elevará el valor de tu trabajo arquitectónico a nuevos niveles.

En este curso aprenderás a realizar maquetas y recreaciones de espacios mediante impresión 3D de la mano de Agustín “Flowalistik” Arroyo. Recorrerás el proceso desde la idea hasta tener el producto en tus manos. Aprenderás a modelar para impresión 3D y las diferentes maneras de postprocesar los diseños que fabriques.

Este es el segundo curso de Flowalistik en Domestika, después de Introducción al diseño e impresión en 3D, un curso básico de impresión 3D que puede serte de gran utilidad para iniciarte en esta disciplina.

¿Cuál es el proyecto del curso?
Diseñarás tu propia maqueta arquitectónica o escenográfica, la imprimirás en 3D y le darás un acabado único y personalizado utilizando herramientas y pinturas básicas.

¿A quién está dirigido este curso online?
Este curso va dirigido a interioristas, arquitectos, diseñadores 3D, maquetistas o cualquier persona interesada en el mundo de la impresión 3D que quiera convertir sus modelos 3D en objetos reales utilizando la última tecnología.

Requisitos y materiales
Para realizar este curso es necesario tener conocimientos básicos de modelado 3D con algún software como AutoCAD, 3ds Max, Maya, SketchUp, Fusion 360, Zbrush, Rhino o incluso, Tinkercad. Adicionalmente, es recomendable tener conocimientos mínimos sobre impresión 3D, aunque es opcional.

En cuanto a materiales, hace falta tener un ordenador (Windows o Mac) y al menos un programa de modelado 3D que conozcas. Además, necesitarás el programa gratuito Prusa Slicer.

Para fabricar tu proyecto, se requiere tener acceso a una impresora 3D, ya sea propia o utilizando un servicio de impresión 3D. En caso de querer postprocesar las piezas que fabriques, necesitarás al menos un cúter, pegamento para plástico, lijas de grano fino y pintura acrílica o en spray.